Hoy te vamos a proponer algunas ideas para hacer la hora de la comida más divertida para tus pequeños.
Manteles
Comenzamos por la decoración de la mesa, esta es una gran motivación para los niños y una forma muy sencilla de llamarles la atención para que tomen su lugar, lo ideal es colocar manteles con sus personajes favoritos. Es una forma de personalizar su espacio e invitarlos a sentarse con la familia. Mientras lo hacen, puedes pedirles que te compartan su momento favorito de la película o que mencionen cuál es su personaje favorito.
Este tipo de manteles son fáciles de limpiar y así evitar que ensucien la mesa.
Dale color a los alimentos
La cantidad de alimentos, la mezcla de colores en el plato y hasta la forma en que presentamos los alimentos influye en tus pequeños.
Cuanto más colores tiene la comida, más atractiva les resulta. Estudios demuestran que los niños prefieren platos que tengan hasta seis colores diferentes, a diferencia de los adultos, que prefieren hasta tres.
Es importante presentarles alimentos variados para que se vayan acostumbrando a probar diferentes sabores.
Recuerda que los niños muestran preferencia por los platos que no están demasiado llenos, aquellos que tienen espacios libres. Siempre está presente la oportunidad de una segunda ración.
Frutas
La fruta es un alimento que disfrutamos tanto de grandes como cuando éramos niños. Si la presentas en cortes divertidos como un premio al terminar la comida será algo que los motive.
Los pepinos pueden ser cortados en forma de serpientes con utensilios muy fáciles de usar. La piña cortada en forma de discos y la manzana en trozos pequeños, lo cual seguramente será otro motivo por el cual deseen sentarse a la mesa y terminar sus alimentos.
Utensilios divertidos
Existen diferentes utensilios de cocina que te ayudarán a preparar los alimentos y que también le agregan un toque divertido. Un ejemplo de esto lo vemos en los contenedores con forma de animalitos para cocer los huevos o darles forma de estrellas o corazones.
Postre
El postre siempre será nuestra parte favorita a la hora de la comida. Puedes escoger entre muchas opciones. Unos hot cakes con forma de Mickey Mouse cubiertos de mermelada o leche condensada, un flan hecho en casa, la gelatina de su sabor favorito, o unas palomitas recién hechas, algo irresistibles para cualquier niño… y adulto también.
Con estas sencillas ideas, y con el toque especial que les puedas dar, estamos seguros de que habrás encontrado la solución para que tus peques no duden en sentarse a la mesa y disfruten la hora de la comida.